LA MADERA DE PLANTACIONES Y SU PROCESAMIENTO INDUSTRIAL
En la primera transformación de la madera (aserrío), el desperdicio promedio pudiera acercarse al 68% de la producción con respecto al 100% de la materia prima, y el rendimiento (factor de recuperación) pudiera acercarse al 32%. En esta etapa, tanto la producción como la productividad están condicionadas por la calidad de la materia prima, el tipo de maquinaria y equipos utilizados para el proceso. Entiéndase por factor de recuperación, el volumen total de productos finales obtenidos al término del proceso de transformación primario, con respecto al volumen total de materia prima rolliza que ingresó al aserradero para su procesamiento industrial.
El efecto inverso que ejerce el diámetro de las trozas (rollizos) sobre el factor de recuperación (rendimiento) de madera aserrada establece que, independiente de la especie, si se utiliza aserrío simple, a menor diámetro mayor desperdicio. Entonces, para una misma unidad de tiempo, la madera proveniente de plantaciones forestales comerciales, requiere de aserrío múltiple y altas velocidades de proceso para obtener altos rendimientos y pocos defectos en la madera aserrada. El aserrío simple utiliza solo una sierra o herramienta de corte en su máquina principal. El aserrío múltiple o de corte simultáneo utiliza varias sierras o herramientas de corte en su máquina principal. En el aserrío múltiple se reduce el efecto inverso que pudiera ejercer el diámetro sobre el factor de recuperación.
Sin embargo, durante la primera y segunda transformación el grado actual de desarrollo en la industria forestal, hace que los conceptos “desperdicio” y “rendimiento” se vuelvan solo una cuestión circunstancial. Por ejemplo, una fábrica de tableros a base de listones de madera, recibe los retazos de madera provenientes del aserrío y los une con chapas provenientes del debobinado para madera terciada y así producir tableros luego, otra fábrica utiliza estos tableros para producir muebles o puertas, haciendo del desperdicio un asunto coyuntural es decir, lo que denominamos “desperdicio” no necesariamente lo es, depende de otros factores y circunstancias.